
MEJORAR LA RELACIÓN CON LA COMIDA
Lo primero que tienes que tener en cuenta es que mejorar tu relación con la comida no tiene por qué implicar un aumento o reducción de peso. Es muy común que tras la frase de mejorar la relación con la comida se esconda el deseo de bajar de peso. Existe mucha presión asociada a la pérdida de peso especialmente en el inicio del año.
Si tienes deseos de bajar de peso lo primero que debes tener en cuenta es que puede ser un proceso largo y complicado donde es posible que necesites de la ayuda de un profesional. En ocasiones y si tu estado emocional dificulta estabilización del peso es posible que requieras de psicólogos expertos en problemas de alimentación y regulación emocional además de un equipo de nutrición y dietética.
La ansiedad y la tristeza son algunas de las emociones que más se relacionan con el consumo de alimentos. En muchas ocasiones se utiliza la comida para calmar la ansiedad o se suprime la comida ante el alto nivel de malestar emocional. Ambos son ejemplos de dificultad en la gestión emocional y el autocuidado.
Mitos y errores que aparecen cuando una persona se propone adelgazar después de las navidades
- Pensar que comer sano es aburrido. Si una dieta es variada la riqueza en la variedad de alimentos está asegurada. Lo unico que necesitarás es explorar y probar nuevos alimentos que quizás no habías explorado.
- Pensar que para adelgazar hay que pasar hambre. No es necesario hacer ayunos o reducir las cantidades de forma estricta, si necesitas saber más sobre proporciones y cantidades de comidas en el plato un Nutricionista podrá ayudarte en este proceso.
- Saltarse comidas para bajar de peso. Espaciar mucho el tiempo entre comidas puede hacer que tus indices glucémicos desciendan demasiado y provoquen sensación de agotamiento y malestar.
- Reducir o eliminar los hidratos de carbono de las dietas. Es ampliamente conocido que los hidratos de carbono son uno de los tres macronutrientes de nuestra dieta, y por lo tanto no está recomendado su eliminación. Los hidratos de carbono nos dan energía para mantener nuestras funciones vitales y nuestra actividad diaria.
Algunos de estos mitos y creencias irracionales sobre la alimentación son alguno de los factores multifactoriales que pueden conllevar al desarrollo de un TCA como es la anorexia o la bulimia. Este tipo de problemas conllevan un alto nivel de malestar emocional y restricción de las relaciones sociales.
TRES CONSEJOS BÁSICOS PARA MEJORAR TUS HÁBITOS ALIMENTARIOS
- Trata de alimentarte de una forma realista y consciente. Simplifica los cambios y hazlo sencillo. Revisa si eres capaz de diferenciar sensaciones de hambre y saciedad, si debes mejorar el ritmo en el que ingieres los alimentos y la relación entres las emociones y la alimentación que consumes. Si detectas dificultad en este elemento puedes empezar a revisar y modificar todo esto.
- Organiza y planifica tus menús. Tómate tu tiempo. Haz un ejercicio sincero del tiempo y la forma en la que te alimentas en el momento actual, busca opciones flexibles y sencillas que puedas llevar a cabo. Puedes empezar organizando la lista de la compra, cocinar y guardar la comida preparada para la semana de forma que sea sencilla y atractiva para ti.
- Se flexible en tu proceso de cambio. Ten paciencia y no tengas prisa. Es posible que si llevas mucho tiempo alimentándote de una misma forma incorporar nuevos cambios en tu dieta sea costoso. Si tus objetivos son muy exigentes será más difícil llevarlos mantenerlos en el tiempo. Es posible que si tus expectativas son desajustadas también sientas mucha culpa e inseguridad en cuanto a tu persona. Recuerda que los cambios llevan su tiempo.
En el Centro YOS podemos ayudarte en tus procesos de cambio relacionados con la alimentación. Si sientes que la comida te obsesiona o no tienes una buena relación con la comida contamos con un equipo de psicólogos expertos en alimentación que pueden ayudarte a tener una buena relación con la alimentación.